Cómo se nota la diferencia cuando no tienes "más que amigos" en el Tribunal que te tiene que juzgar. Hoy se ha levantado el secreto sobre el sumario de la trama Gürtel, que ya no se dice que "afecta a cargos del PP", sino que puede ser una trama de financiación ilegal del mismo.
Los 17.000 folios darán para mucho, pero ya hay verdaderas perlas cultivadas y el tema ya no queda en unos trajes para Camps o los manejos privados del tesorero del PP. Aparecen conexiones en Castilla y León, Galicia, Madrid y Comunidad Valenciana (los de Baleares no salen, estos se bastan solos), con porcentajes fijos de comisiones y regalos para todos, incluido Alberto López Viejo, un estrecho colaborador de la Dame Commander, que ahora pide una transparencia que espero no sea como la que le otorgó a la comisión de investigación del espionaje de Madrid.
Aunque me cuesta creer que Rajoy no estuviera al tanto, lo estuviera o no, esto es un torpedo a su línea de flotación, con Camps agarrándole de su hombría y Juan Costa, ex-ministro de Aznar y hermano de Ricard Costa diciendo que su hermano "cumplía órdenes", o actúa a la voz de YA o se puede dar por políticamente muerto. Y aún así, ya veremos.
Después de esto, el PP necesitará una regeneración a base de bien pero, ¿quién se hará cargo? Todos, o casi todos, están directa o indirectamente implicados en todo esto, o porque han metido la mano o porque la han metido sus más directos colaboradores, lo que tampoco les deja en buen lugar como opción de futuro. Sólo se me ocurre Gallardón (si no hay nada que le afecte, que de momento parece que no) aunque lo de Madrid 2016 le puede haber dejado muy tocado, o Rodrigo Rato, que no creo que esté por la labor. El resto tiene demasiados muertos en el armario, empezando por el propio Aznar, al que habría que preguntar por qué Correa fue testigo en el bodorrio escorialense de su hija.
A todo esto, el PSOE que meta mano en Estepona, donde por lo visto hay concejales socialistas corruptos y le dé una bofetada al PP en la mejilla de los susodichos, que son las que más duelen. Y que no haga nada más, que se dedique a gobernar, que falta hace, porque como se diría en argot futbolístico, el PP "se marca solo".
Los 17.000 folios darán para mucho, pero ya hay verdaderas perlas cultivadas y el tema ya no queda en unos trajes para Camps o los manejos privados del tesorero del PP. Aparecen conexiones en Castilla y León, Galicia, Madrid y Comunidad Valenciana (los de Baleares no salen, estos se bastan solos), con porcentajes fijos de comisiones y regalos para todos, incluido Alberto López Viejo, un estrecho colaborador de la Dame Commander, que ahora pide una transparencia que espero no sea como la que le otorgó a la comisión de investigación del espionaje de Madrid.
Aunque me cuesta creer que Rajoy no estuviera al tanto, lo estuviera o no, esto es un torpedo a su línea de flotación, con Camps agarrándole de su hombría y Juan Costa, ex-ministro de Aznar y hermano de Ricard Costa diciendo que su hermano "cumplía órdenes", o actúa a la voz de YA o se puede dar por políticamente muerto. Y aún así, ya veremos.
Después de esto, el PP necesitará una regeneración a base de bien pero, ¿quién se hará cargo? Todos, o casi todos, están directa o indirectamente implicados en todo esto, o porque han metido la mano o porque la han metido sus más directos colaboradores, lo que tampoco les deja en buen lugar como opción de futuro. Sólo se me ocurre Gallardón (si no hay nada que le afecte, que de momento parece que no) aunque lo de Madrid 2016 le puede haber dejado muy tocado, o Rodrigo Rato, que no creo que esté por la labor. El resto tiene demasiados muertos en el armario, empezando por el propio Aznar, al que habría que preguntar por qué Correa fue testigo en el bodorrio escorialense de su hija.
A todo esto, el PSOE que meta mano en Estepona, donde por lo visto hay concejales socialistas corruptos y le dé una bofetada al PP en la mejilla de los susodichos, que son las que más duelen. Y que no haga nada más, que se dedique a gobernar, que falta hace, porque como se diría en argot futbolístico, el PP "se marca solo".
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